"Arcángel del Apocalipsis"

Estimad@s lectores: Esta es una historia a raíz de un sueño, muy pocas veces he hecho este ejercicio, espero que sea de su agrado.

                                                    "Arcángel del Apocalipsis"

"Hace un tiempo atrás existió un oscuro cazador, cuyo nombre no puedo acordarme, sus rasgos eran duros, mostraba cierto rechazo a las personas de su época, siempre solo, huraño, triste y marginado. De sus ropas no hes mucho lo que hay que decir, simplemente vestía un par de botas negras, un sombrero y un abrigo de paño el cual dejaba entre ver parte de su vestimenta, su arco y su carcaj de cuero gris con flechas, las más certeras que el hombre aya conocido en su vida.

Un día recorriendo los bosques de su pueblo natal, se vio perdido entre las espesura de aquellos majestuosos robles de un encantamiento sin igual. La luz de la luna penetraba lo que podía para poder guiar al cazador en su travesía pero no hacia más que darle un vago atisbo de esperanza a quién ya la había perdido.  Tras horas y horas de un incesable andar, por aquella sepulcral senda decidió darse un pequeño y merecido descanso, un descanso que, podría ser el último.

La noche corría como un corsé sin jinete, como una liebre por medio de la llanura, como un chita en la sabana, y una voz, la más rara y desconocida de todas llamo al oído del cazador. Entre dormido, este pesca su arco y sus flechas preparándose para disparar a quién tuviera en frente, pero un frío desolador lo invadió,  posteriormente un ensordecedor sonido de aquellos violines sangrantes y estridentes dio paso a una imagen, aquel arcángel que lo llevaría a su descanso eterno.

Por sus ojos pasaron recuerdos de la infancia, como una vaga ilusión de un pasado mejor, el arcángel, buscó, miró, indagó y descubrió un universo en medio de tanta maldad, mares de ambiciones de aquel cazador, el único y verdadero amante de la luna quién le dice con su mirada gentil e ilusionada:- "No tengas miedo".

Era de esos sueños con sabor a realidad, donde este cazador busca en el interior de su alma algún vestigio de su recuerdo, de si imagen, de su equilibro de su aroma y su castigo, ¿quién abra sido ese arcángel del apocalipsis que se para frente a su vida?...

... Solo él, la luna y su sueño lo sabe."