lunes, 21 de julio de 2014

El lobo en la Pampa.

Ha pasado mucho tiempo en que no tomaba el blog y publicar algo que nazca del corazón. Todo tiempo quizá fue mejor que el que viene, pero la vida siempre es así, muchas veces estamos arriba otras abajo, "semper crecis, aut decrecis", pero esto no se trata de, como escritor veo la vida, sino de un lobo que estaba en medio de la Pampa.

"Cuenta la leyenda, que oculto en los pequeños matorrales casi sin vida, había un lobo echado en sus cuatro patas esperando el momento idóneo de dejar su guarida y salir a recorrer el mundo en posición bípeda.
Una noche de luna llena aquel lobo salió de ese lugar tan inhóspito. La caminata fue ardua, larga al rayo del sol, entre el calor sofocante del piso y ese aire cálido que acompañaba el paisaje desértico.

Cuando, ese lobo, había perdido toda esperanza de poder encontrar un poblado para poder mezclarse entre las personas un sonido estremecedor sonaba a lo lejos. Sin dudarlo, siguió adelante con el ahínco necesario para poder llegar a aquel lugar. Las horas pasaban a prisa y el caminaba y caminaba hasta que al caer nuevamente la noche, logró llegar a aquel lugar.

Era un pequeño pueblo lleno de color, luces, danzas, alegría y magia, ¿podría llegar a ser feliz en aquel lugar?-  se preguntó y se aventuró a recorrer el lugar. Con sus ropas de mago, se metió entre los bailarines, gozó como si fuera uno más de ellos, su corazón latía cada vez con mayor rapidez, si, estaba feliz de estar allí, su mirada era distinta, pero aun así estaba inquieto.

Sin dudarlo dos veces, decidió quedarse, porque se sentía bien consigo, era todo lo que el deseaba, pero no todo había terminado.

Pasaron las horas y una mágica visita apareció ante sus ojos, una mirada amable la cual podía calmar cualquier corazón inquieto o rebelde, una enigmática sonrisa revitalizadora de almas, unas manos perfectas con las cuales sabias que no te haría daño, que sólo sabían acariciar y servir. El lobo perplejo simplemente cerró sus ojos, se arrodilló ante tal belleza esperando que esta le hablara, pero no fue así, solamente extendió su mano, la posó sobre el hombro derecho del lobo y este comprendió que no estaba solo, que ella lo acompañaría para ser nuevamente feliz, olvidando sus penas, las angustias y dolores.

Feliz el lobo supo que ya no podría separarse de ella, pero debía volver a su madriguera. Si, volvió pero con un corazón distinto, comprendido que la vida es más importante que el sufrimiento, que hay cosas más importante que aquellas personas que te ignoran o te hacen daño, que tú eres importante como para dejarte pisotear por quienes quieren ser superiores a costa del sufrimiento de los demás, comprendió finalmente que la felicidad depende netamente de su corazón y no de las circunstancias que lo rodean.

Al llegar a su madriguera se echó en sus cuatro patas y simplemente sonrió."

Como mencioné en el comienzo hacía tiempo que no tomaba el blog y escribía espero sea de su agrado.
Bendiciones.